Warcerer

Juego de rol de fantasia epica, no medieval, con tintes de high magic, y bastante artefacticista... en fin, tiene de todo...

viernes, abril 28, 2006

LA ROSA DE HIERRO

Ubicada cerca de la ciudad de Kilmoria, se encuentra la torre negra. En la distancia puede divisarse, alta y recortando el cielo. Al verla desde lejos, y ver las hojas negras, no es dificil adivinar el origen de su apodo.

No se sabe si en realidad está hecha de hierro, o si es siquiera metal lo que compone su estructura, pero la verdad es que poco importa esto. La torre es un símbolo. Si no existiera, bastaria con que perduraran sus warcerers, para hacerles recordar a los reinos que la justicia llega, eventualmente, a todos.

Si bien cada torre tiene su filosofia y su manera de mantener un cierto control sobre la jurisdiccion que posee, la torre de hierro es por un lado la que menos interviene en estos reinos, y por otro lado una de las que más lo hace. Casi todas las demás torres gobiernan, legislan y reparten justicia (además de recaudar ciertos impuestos en algunos casos). No es así con la torre de la Rosa Negra. Esta se limita a mantener en cumplimiento el código de la torre, el cual pena el uso maligno de la magia, y las muertes sin fundamento. Por lo demás, salvo por regular ciertos procedimientos de intercambio de bienes, y evitar que estos perjudiquen a alguno de los que los realizan, es bastante escueto. Ha habido intentos de crear un código que legisle todos los aspectos de la vida en sociedad, pero han fallado. Salvo en Kilmoria, claro que la torre no ha tenido intervención en esto. Valker, el supremo administrador de la ciudad (él utiliza sólo el ultimo termino, ya que cree que "supremo" es demasiado pomposo) ha conseguido unificar ciertas prácticas de justicia que se utilizaban en distintas partes del reino, en tres voluminosos libros. Uno para las practicas comerciales, otro para ciertas instituciones, y el tercero para la aplicación de penas en caso de los llamados "delitos", sean estos el matar, robar, o realizar acciones viles.

Las penas que Valker impone no son tan duras como las de la torre, por lo que muchos habitantes de las jurisdicciones, que han cometido delitos penados con la muerte en el lugar en donde los cometieron, piden clemencia en Kilmoria.
La torre no esta contenta con estos sucesos, principalmente porque no controla lo que sucede en la ciudad, y no puede destituir a Valker. El hacerlo iría en contra de todo lo que ella representa, que es el sólo administrar justicia. O eso es lo que dice la torre, Valker tiene su propia visión. Él sabe que es suficientemente poderoso como para que la torre tema las consecuencias de una pelea abierta.

Por eso la torre espera, y mientras, caza a los seres oscuros por el resto del reino. Hay muchos dragones sueltos, como para preocuparse por temas nimios. Después de todo, Kilmoria es sólo una ciudad. Y Valker es un elfo impuro, y éstos suelen morir mas pronto.